Esperanza

El bronce cuenta historias del pueblo, a veces de amor, a veces de gloria, a veces de muerte. Hoy no cuenta una historia de esperanza. Las horas pasadas, fijas, en el mismo punto donde una vez dijeron de verse. Las arrugas marcan ya el rostro del dolor y una joven mano aprieta con fuerza aquellas que conocieron el sufrimiento. La mirada al frente, siempre alta, oteando el azul horizonte, ese que, a veces, funde el cielo con el mar en un solo todo. Mujer, no dejes de buscar a aquel que se fue al azul inmenso, la vuelta ya está cercana, nunca pierdas la esperanza.

Monumento a la mujer del Marinero: Isla Cristina
Fotografía: Guillermo Ramírez Torres

Sobre la Fotografía

 No se que suerte de arte es, ni siquiera de si su existencia es algo físico, quizás sería un error "verlo" así. ¿Es un ente o bien una realidad tangible y material? ¿Reside en el alma, en el corazón o en un papel? Preguntas que surgen cuando no pensabas que lo harías. En este teatro prefiero estar detrás de la tramoya y los artilugios, ser el operador que controla los pasos de la actuación, aunque muchas veces desearía ser ese actor que da el "Do de pecho". Quien sabe si lo soy, si solo soy un espectador o aquel que oye que hubo una actuación y no supo donde ocurrió. Muchas preguntas me surcan la tormenta de pensamientos que abaten mi cabeza, quizás sea mejor verlo todo en perspectiva y dejarse llevar por el dedo que acciona el mecanismo capaz de superar a la muerte, esa es la única distancia, la que existe entre el alma y el dedo, el sonar de una cortinilla y la vida eterna.

Fotografía: Guillermo Ramírez Torres

Luces de otros tiempos

 

El tiempo lo dice, los árboles comienzan a mostrar los blancos corazones, esos que conforman la esencia junto con el incienso, perfumando los días de la Sevilla de nuestra eterna infancia e interminables primaveras. Las luces nos anuncian  que el Barroco es un sueño que aún no terminó, y en la Ciudad juega a mostrarnos la grandeza del teatro de los sueños. Cuando la luz se va y solo queda esa otra luz, más mística, real, espiritual nos muestra que por muy oscuro que esté todo, la primavera de los sentidos siempre llega a Sevilla.

13 de Febrero de 2013-Miércoles de Ceniza.

Fotografía: Guillermo Ramírez Torres

"Ícaro"

Mi estilo radica más que en grafías propias, en la temática, predominando en este caso, la mitológica. Esta temática sirve como medio para explicar los hechos que ocurren a diario de una forma mítica, siendo un conocimiento anterior al científico pero no por ello peor, pues se narraban historias de grandes hazañas. Personalmente le doy mucha importancia a contar historias, de ahí que busque eso, que aquello que realice invite a buscar más información sobre el tema.

En este caso la temática principal del grabado es la del joven Ícaro, que según nos cuenta la mitología, era hijo del famoso escultor y arquitecto Dédalo. Ambos fueron encerrados por el Rey Minos, de Creta en el conocido Laberinto del Minotauro, del que Dédalo fue constructor. Para poder huir de allí realizaron con plumas y cera unas alas con las que se elevarían y huirían de su aprisionamiento. Cuando lo hicieron, Ícaro, el joven y descarado, se sintió poderoso y se propuso llegar al Sol. Dédalo conociendo que la cera se derretiría por la proximidad al astro rey avisó enérgicamente a Ícaro, quien prosiguió su empeño. Finalmente y llegado a una distancia considerable las alas se derritieron y con ellas cayo Ícaro precipitándose vertiginosamente al mar donde hallaría la muerte.

En mi grabado represento el momento en el que Ícaro se precipita al mar mientras las alas se rompen. En él podemos ver a Ícaro en escorzo, las alas rotas y el sol con sus flamígeras ondas. Para realizarlo me inspiré en el Contraluz fotográfico así como en el efecto del programa de retoque de imágenes, “Photoshop”, “Posterizar”.

El collagraph está realizado sobre un cartón de 21 x 29,7 cm al que añadí tarlatana para la textura del Sol, cola y carborundo para la figura de Ícaro, pasta de relieve para las alas y finalmente hilo y pasta para los rayos del sol. Apliqué las correspondientes capas de goma laca e imprimé en relieve para estampar con tórculo sobre papel mojado Hahnemüle de 42 x 30 cm.

"Caronte"

Mi estilo radica más que en grafías propias, en la temática, predominando en este caso, la mitológica. Esta temática sirve como medio para explicar los hechos que ocurren a diario de una forma mítica, siendo un conocimiento anterior al científico pero no por ello peor, pues se narraban historias de grandes hazañas. Personalmente le doy mucha importancia a contar historias, de ahí que busque eso, que aquello que realice invite a buscar más información sobre el tema.

En este caso la temática principal del grabado es la de la divinidad menor Caronte, conocido como el barquero del infierno. Caronte es el encargado de transportar a las almas por la laguna Estigia, puerta del Hades. Como cobro de sus funciones obtiene dos óbolos, que en los rituales funerarios son colocados sobre los ojos de los muertos. Se le suele representar como un viejo decrépito, triste y tiránico que atosiga a las almas que transporta en su barca. Pocos son aquellos vivos que cruzan la laguna y vuelven, como ya le ocurriera a Eneas.

En la Historia de Arte siempre ha sido un personaje que ha levantado mucho interés y es representado por Miguel Ángel en el fresco del Juicio Final en la Capilla Sixtina. Aunque dentro del grabado, Gustav Doré fue el que mejor lo representó.

En mi grabado, Caronte es casi una sombra, un espectro triste y demacrado que ejecuta su deber sin la menor pega. El fondo, aprovechando las vetas de la madera y algunos claros, sirve para simular la laguna Estigia y la oscura profundidad del Averno. Sobre la laguna, la barca, que se constituye de cadáveres, con lo que gana en dramatismo la imagen.

Esta obra está realizada sobre una sección transversal de un tronco, grabándose la imagen con buril, es decir, la técnica de la contrafibra. Tras haber pulido bien la madera procedí a grabar la imagen y tras entintarla con rodillo la estampé sobre papel Fabriano Rosaspina de color crema de 35,7 x 25 cm.

"Prometeo encadenado"

Mi estilo radica más que en grafías propias, en la temática, predominando en este caso, la mitológica. Esta temática sirve como medio para explicar los hechos que ocurren a diario de una forma mítica, siendo un conocimiento anterior al científico pero no por ello peor, pues se narraban historias de grandes hazañas. Personalmente le doy mucha importancia a contar historias, de ahí que busque eso, que aquello que realice invite a buscar más información sobre el tema.

En este caso la temática principal del grabado  es la del titán Prometeo encadenado en el Cáucaso. Este castigo fue impuesto a Prometeo tras robar el fuego del Olimpo para devolvérselo a los humanos. Se le suele denominar también como “el dios filántropo” ya que se cuenta que él modeló a los seres humanos con barro y que posteriormente siempre intentó ayudarlos. Pero el castigo que Zeus, el gran dios de la mitología griega, le impuso fue aún peor, ya que a diario Zeus el tronador, enviaba a su águila que le devoraba el hígado y posteriormente se marchaba. Durante la noche el hígado volvía a regenerarse y así sucesivamente, era un gran castigo para la eternidad. Así ocurrió hasta que Heracles en uno de sus viajes asaetea al águila y libera a Prometeo de su castigo.

En la estampa vemos el momento en el que Prometeo, encadenado y resignado, mira hacia el horizonte a la espera de su tormento, soñando quizás en su libertad algún día. En las montañas se aprecia la silueta del águila torturadora.

Esta obra está realizada sobre metacrilato de 21x29,7cm mediante la técnica de la punta seca y estampándose con tórculo sobre papel mojado Hahnemüle de 42 x 30 cm.  Para el entintado, previamente achaflané las aristas y perfiles y posteriormente apliqué la tinta con muñequilla y retiré el exceso con la tarlatana sin apresto. Para poder obtener más claros, apliqué suavemente papel de seda.

"Heracles cazando las aves del Estínfalo"

Mi estilo radica más que en grafías propias, en la temática, predominando en este caso, la mitológica. Esta temática sirve como medio para explicar los hechos que ocurren a diario de una forma mítica, siendo un conocimiento anterior al científico pero no por ello peor, pues se narraban historias de grandes hazañas. Personalmente le doy mucha importancia a contar historias, de ahí que busque eso, que aquello que realice invite a buscar más información sobre el tema.

En este caso la temática principal del grabado es uno de los Doce Trabajos de Heracles (Hércules, para los latinos) que le fueron encargados por su medio primo, el rey de la Argólida, Euristeo. En concreto se trata del sexto trabajo. Esta estampa, aparte de tema mítico también tiene como temática la caza, siendo pues cinegético. En dicho trabajo le encargan a Heracles que mate a las aves que viven en la laguna del Estínfalo y que están atemorizando a los habitantes de la región. Se dice que dichas aves de gran tamaño sembraban el terror con sus plumas cortantes de bronce, mismo material del que estaban hechos sus picos y plumas. El héroe tebano no pudo matarlas a todas pero si las espantó de la zona, superando tal trabajo.

En la estampa vemos a Heracles desde una orilla de la laguna del Estínfalo disparando a las aves que se aproximan con su arco, mientras en el suelo reposan sus atributos, la maza y la piel del león de Nemea.

Esta obra está realizada en PVC con grabado de gubias. Tras el entintado procedí a su colocación bajo el tórculo que estamparía el grabado en el papel mojado Hahnemüle de 42 x 30 cm.